Cuando Marcos Aguilella (Onda, Castellón, 2000) empezaba a despuntar en el balonmano y era convocado por los Hispanos Junior, pocos podrían imaginar que aquel prometedor extremo zurdo podría, años más tarde, está detrás de una de las investigaciones para la detección de enfermedades más innovadoras e importantes.El actual jugador del Blendio Sinfín, que está sumido de lleno en la lucha por volver a la Liga Plenitude ASOBAL, compagina su actividad como deportista profesional en la escuadra santanderina al tiempo que trabaja en el IDIVAL (del hospital de Valdecilla) como biotecnólogo. Ha explicado su historia en los micrófonos de SER Deportivos Cantabria, junto a Óscar García Mayo.