Podium
Una madre denuncia ante la Policía que a su hijo de 15 años le han propuesto, a través de Facebook, hacerse una sesión de fotos insinuantes. Héctor, un mosso d’esquadra especializado en homicidios, comienza a investigar el caso y llega hasta el supuesto fotógrafo: David Donet. Se trata de un hombre de 50 años que es, además, padre de acogida de varios niños y jóvenes en situaciones complicadas, en una casa de acogida que depende de una fundación reconocida por el Gobierno catalán. Donet lleva más de una década tutelando chavales y jamás ha tenido ningún problema, pero el equipo de investigación que lidera Héctor teme que en esa casa se genera y se colecciona pornografía infantil.
El nombre de Igor El Ruso apareció en los periódicos españoles hace tres años cuando asesinó a tres personas en un pequeño pueblo de Teruel. Pero esta era solo la punta del iceberg de una historia llena de interrogantes que la periodista Patricia Peiró trata de responder en estos cinco episodios.
A Héctor le quedan centenares de horas por visionar, no es fácil pero sabe que por cada niño identificado, David Donet cumpliría una nueva pena por abuso. Durante el visionado de las cintas, hay algo que le llama la atención: no hay ningún signo de violencia, ni siquiera de que esos niños estuvieran ahí, obligados, contra su voluntad. Todo lo contrario, aparecían riendo, para ellos todo era un juego, una situación natural. Donet había conseguido crear un hábito a partir de una completa barbaridad.Héctor cita a Santi en la comisaría. Él lleva más de 14 años viviendo con David Donet, sale en el 70% de los vídeos y confía en que le pueda ayudar a identificar a los niños. Pero, sobre todo, hay una pregunta que sigue en el aire, la más importante y que no termina de entender: ¿Cómo es que este hombre tenía una casa de acogida y tutelaba niños desde hace más de 15 años? ¿Por qué nunca nadie detectó nada?
Nadie en 17 años detectó nunca nunca nada. Y cuando David Donet fue detenido, nadie quiso asumir errores. Todos miraron a la Fundación Juvanteny que era la encargada de controlar la familia de Donet. Aquella extraña familia había vivido en su particular “normalidad” durante tanto tiempo que los niños, no exteriorizaban las violaciones cuando acudían a los psicólogos. “No eran abusos como yo los entiendo, simplemente eran relaciones”, justificaba Donet.En este último episodio conocemos un poco más el pasado de Santi y Montse Juvanteny, la directora de la Fundación Juvanteny, aporta su visión de toda esta historia. Llevaba años trabajando en centros de acogida, creyendo que estaba protegiendo a esos niños. Cuando se descubren las atrocidades que estaba cometiendo Donet, se da cuenta de que, no sólo no protegía a aquellos niños sino que los había colocado en la boca del lobo.¿Cómo acabó todo? ¿Qué fue de Santi? ¿Cuál fue la condena de David Donet?